Hay flores que no se encuentran fácilmente, flores que tienen carácter.
Flores que no vienen de lejos, sino que crecen lentamente, aquí, en nuestro jardín.
Con ayuda de la lluvia, con el sol, nuestras manos y con paciencia.
Flores que quizás hayas visto en el jardín de tu abuela, en huertos antiguos o en los márgenes del camino.
Flores que vuelven a nacer gracias al cuidado, al tiempo y al amor.
🌿 Son flores antiguas, recuperadas y únicas.
Las cultivo yo misma, sin químicos ni prisas, siguiendo el ritmo de la naturaleza. Las sembramos, las cuidamos y las cortamos cuando toca — ni antes ni después.
Y cada ramo cuenta una historia diferente, como cada madre.
Regalarlas es regalar tiempo, cuidado, tierra, recuerdos y amor.
💌 Si quieres regalar a tu madre algo especial —una emoción más que un objeto; flores que duran, no solo en el jarrón, sino en el recuerdo—, estas flores son para ella. Y también para ti, si eres madre y te quieres cuidar 🌷
📦 Encargos abiertos para el fin de semana del Día de la Madre
✅ Ramos exclusivos en cantidad limitada
📍 Recogida en el jardín o entrega local
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